Un joven de 19 años fue detenido en la madrugada de ayer tras protagonizar una peligrosa maniobra de conducción temeraria en pleno centro de la ciudad. El hecho ocurrió sobre la intersección de las calles 12, 13 y 15, donde el implicado fue interceptado por personal del Departamento 911, en el marco del Operativo Anti-Wileros.
El conductor, a bordo de un vehículo Citroën C4 gris, realizaba maniobras imprudentes por distintas arterias del casco céntrico, lo que generó preocupación y alarma entre los transeúntes. Gracias al monitoreo de cámaras de seguridad, los efectivos policiales lograron seguir sus movimientos y desplegar rápidamente un operativo cerrojo en coordinación con la Comisaría Primera.
Al momento de la detención, el joven se mostró exaltado y presentaba signos evidentes de estar bajo los efectos del alcohol, además de haber intentado inicialmente ocultar su identidad. Más tarde, fue identificado como R.S.M., de 19 años, estudiante con domicilio en el barrio San Martín.
En el lugar, personal de la División Tránsito Urbano y Patrulla Vial le realizó un test de alcoholemia mediante el dispositivo Dräger, que arrojó un resultado positivo de 0,23 g/l de alcohol en sangre (prueba N° 367).
Se procedió a su aprehensión y al secuestro del vehículo, todo ello en presencia de un testigo hábil. La División Medicina Legal también intervino en las actuaciones de rigor. El joven y el automóvil fueron trasladados a la Comisaría Primera, donde se dio continuidad a las diligencias judiciales correspondientes.
Desde la fuerza policial recordaron la importancia de la prevención y el control del tránsito, especialmente en el marco de los operativos de fin de semana destinados a desalentar conductas imprudentes y evitar siniestros viales.